En un principio no se tenia mucho conocimiento sobre sus debidos cuidados, pero indagando en internet se encontró que al tratarse de una planta rastrera debía consumir bastante sol y por ende sus riegos ser frecuentes, al mismo tiempo que su riego debía ser abundante y mojar debidamente la tierra, al igual que usar un fertilizante adecuado para ayudar a acelerar su crecimiento. Al día de hoy algunas hojas se vieron afectadas por el cambio y se notan con un tono verde muy seco, y sus hojas de una textura dura, sin embrago se encuentran bien ya que hay señales de que nuevas hojas están por salir y al día de hoy ya se pueden percibir también nuevas raíces, por lo que se piensa continuar con los tratos que se vienen siguiendo.